Muchas personas creen, que cuando fallece un familiar, sus bienes pasan a ser de manera inmediata de sus herederos.
Aunque haya un testamento, e incluso un solo heredero, la muerte del causante hace que todo su patrimonio pase de forma provisional a estar a no tener titularidad, es la llamada herencia yacente.
Este estado termina cuando los herederos aceptan la herencia, y se convierten en propietarios de todo o parte de ese patrimonio.
En ese periodo, los pisos, saldo en cuentas, garajes, etc… no podrán venderse ni alquilarse y ni tan siquiera podrá disponer del dinero que haya en los bancos.